A la señora Wellington le gusta tomar el té, ni demasiado frio, ni demasiado caliente, a las 5 en punto de la tarde.
A la señora Wellington le agrada conversar acerca de como año tras año florecen las gardenias en el jardín de atrás.
A la señora Wellington le entusiasman sus clases de cocina con el recetario de especias heredado de la abuela Eleanor.
A la señora Wellington le satisface acabar el día releyendo su colección de obras completas de Jane Austen.
A la señora Wellington le fascina sentir la aguja taladrar su piel mientras se tatúa cosas blasfemas.
A la señora Wellington le vuelve loca la ropa interior de cuero y PVC.
A la señora Wellington le produce extremo placer que la azoten mientras grita amarrada a los barrotes de su cama del siglo XIX.
martes, 5 de mayo de 2009
señora Wellington
Publicado por Veda a las 3:40:00 p. m.
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3 comentarios:
la señora Wellington preparó emparedados en mi casa cuando murió el tío Bob.
A la señora Wellington le gustan hacer collages con pelotillas de mocos y otras sustancias.Yo misma le compre uno en su última exposición: "yo y mis cosicas"
Vaya, veo que todos apreciamos mucho a la señora Wellington y sus curiosas aficiones
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